Ciertamente, hablar sobre humildad y abogados puede llamarnos la atención, pues qué duda cabe que existe una idea generalizada, incluso entre nosotros mismos, sobre la imagen del abogado caracterizada por su actitud segura, desafiante y beligerante que poco casa con la idea de humildad que solemos manejar.

Sin embargo, que nadie se lleve a engaño, la humildad es una de las virtudes esenciales del abogado, y cuando citamos esta virtud nos referimos a la primera acepción de nuestro diccionario, es decir, la virtud que consiste en el conocimiento de las propias limitaciones y debilidades y en obrar de acuerdo con este conocimiento…

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