Tras un detenido estudio del asunto, la preparación del informe constituye un ejercicio de reflexión estratégica, ya que cuando encaramos esta fase debemos sopesar todo el material estudiado con el fin de plantear la estrategia más acorde con nuestras pretensiones. Ya sabemos cuáles son los hechos; incluso disponemos de una idea aproximada de cómo se va a desarrollar la prueba; también sabemos las normas jurídicas, doctrina y jurisprudencia aplicables al caso.

Con estos antecedentes, en el post de hoy vamos a examinar con detalle una opción para la elaboración del informe oral en lo que atañe a la argumentación, o lo que es lo mismo,  la fase en la que los abogados fundamentan las ideas centrales de su discurso a través de un ordenado examen crítico de las pruebas y la aplicación de la ley, doctrina y jurisprudencia, con el fin de sostener la validez de los hechos que se hicieron durante la fase de la narración, todo ello con el fin de persuadir y convencer al auditorio.

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