Este libro no tiene más ambición que hacer pasar un buen rato al lector y, con un poco de suerte, robarle una sonrisa. No obstante, si éste es un abogado joven, esta obra podrá transmitirle algunas enseñanzas de lo que aprendí aquellos años a través de estas experiencias; si algo he comprobado con el paso de los años, es que la abogacía es una profesión en constante evolución (doy fe de ello, pues a mí me ha tocado vivir el mayor cambio), pero si bien esos cambios que se van produciendo afectan al modo de ejercer, lo cierto es que se mantiene una esencia indestructible en algunos aspectos de la forma en la que el abogado vive la profesión y que difícilmente cambiará.

Me refiero con ello a la emoción con la que el abogado vive las numerosas interacciones (consigo mismo y con terceros) que se producen en su día a día, conglomerado de vivencias y experiencias que, de una u otra forma, se repetirán por mucho que evolucione la abogacía y que, mientras mejor sepamos afrontar, con mayor calidad avanzaremos en esta carrera de obstáculos sin final que es el abogar.

Finalmente, una referencia al título; el libro abarca las aventuras y peripecias porque, cuando empiezas, ante ti se abre un mundo nuevo en el que todo son sucesos y acontecimientos resaltables en los que disfrutas y aprendes, pero también te encontrarás con situaciones complejas, difíciles y dañinas en las que sufrirás y, en mayor medida, aprenderás.

Espero que pases un buen rato en compañía de aquel joven abogado que, solo ante el peligro, apretó los dientes y empezó a caminar.

ISBN: 978-84-09-54027-3

Depósito Legal: SE-1660-2023

Ancho (mm): 150

Alto (mm):210

Papel: 80 Blanco Offset

Color: Blanco/Negro

Páginas: 348

Acabado: Fresado

Tipo Cubierta: Brillante

Solapas: Sí

Lomo: 18