El post de hoy es ciertamente breve, y lo es porque pretende limitarse a hacernos reflexionar sobre la importancia que tiene el efectivo cobro de los honorarios profesionales por nuestro trabajo.
Para ello, me limitaré a transcribir un párrafo de un post del abogado y consultor psicológico argentino Santiago Sinópoli (Honorarios: la sal de la vida, pero me cuesta cobrarlos, http://www.legaltoday.com/opinion/articulos-de-opinion/honorarios-la-sal-de-la-vida-pero-me-cuesta-cobrarlos), que sin duda os llevará a recapacitar sobre esta especie de “maldición” que pesa sobre nuestra práctica profesional:
“…el primer paso lo debe dar el abogado hablando claro desde la primer consulta, para no dejar dudas, que la profesión no es un acto de caridad o amor, que no es una función meramente altruista, que más allá del compromiso ético del abogado de hacer todo lo necesario para que su cliente deje de sufrir por un acto de injusticia, hay una contraprestación por los servicios prestados, que no se satisfacen con la bendición o el muchas gracias, sino con el pago de un justo honorario que es la sal de nuestra vida como el de cualquier otra persona”
Acto de caridad o amor, altruismo, más allá del compromiso ético, acto de injusticia, el muchas gracias, pago de un justo honorario, etc…, muchas ideas sobre las que pensar y debatir en tan breve párrafo.
Ahí queda eso…
Por lo demás, os espero este jueves 18 a las 16,30 en el salón de actos de ICA Madrid en la jornada sobre Técnicas de Gestión de Honorarios Profesionales para abogados. Para inscribirte:
5 comments
Comprendo que todo trabajo debe de ser pagado, pero el costo de el de ustedes es excesivo, sabes lo que duele que después de haber gastado una millonada, dejando de pagar muchísimas cosas atrasandote en los pagos …tu abogado pierda tu caso? es como para tirarse de un puente de cabeza, y con la tranquilidad que los abogados te hablan de sus honorarios como si el dinero saliera por una tuberia!!!! ojala esto un dia cambie porque los ves que viven como millonarios a costilla del dinero que cobran de la gente de los pobres necesitados que puede que por los problemas que se nos presentan problemas que ni los mismos abogados con todo su maestria se pueden librar de ellos, nos machacan con delicadeza, bajen sus precios y sean mas humanos y considerados que en muchos casos el que les paga lo hace sin poder hacerlo y teniendo que limitarse de muchas cosas por culpa de sus honorarios !!!!! abusadores precios que en muchos casos cobran como si fueran dioses !!!!!
Alberto, lamento que hayas tenido una experiencia así, pero no se puede generalizar; conozco a muchos abogados (que constituyen la gran mayoría) que cobran poco y mal, y aun así y gracias a sus vocaciones, continúan realizando una labor importantísima en la defensa del ciudadano (y no es un tópico). Gracias por tu aporte.
Si cobras poco, entonces dudan de tu capacidad, si por cobrar poco no tienes oficina peor , das un precio y regatear, si aceptas el pedido de rebaja asumen que estas desesperada y te piden pagar en partes, les dices la verdad sobre las probabilidades de éxito en su caso y…… B uscan otro Abogado/a que les diga lo que quieren oír, aunque no sea cierto.
Asi es Gloria…desgraciadamente.
Yo entiendo que lo lógico sería que el abogado exija honorarios solo si gana el asunto a su cliente, de lo contrario, deberá ser el cliente quien, en su caso, se comprometiera a compensar al abogado en función de dos parámetros: su realidad económica, que será la resultante de que su abogado NO ha conseguido ganarle el caso, y su grado de satisfacción con el servicio recibido. Y lo digo porque no es lo mismo perder un caso habiendo hecho el abogado todo cuanto pudo para lograr un resultado favorable para su cliente, que pasando de todo, algo que, tristemente, es muy común.
Los clientes no somos idiotas, y distinguimos perfectamente cuando estamos ante un abogado que conoce la materia, que se molesta y tiene interés de resolver la papeleta a nuestro favor, a cuando estamos ante un inutil o ante quien le importa un carajo nuestra suerte. Y si firmamos una hoja de encargo bajo el régimen de arrendamiento de servicios, nos estamos comprometiendo a pagar a ciegas. Si nuestro abogado resultara ser un incompetente, y quisieramos, como es lógico, recuperar lo abonado hasta el momento, no nos quedaría otra que acudir a los tribunales, porque el abogado jamás iba a reconocer su mala praxis, y eso no puede ser.
Hasta que veamos como lidia el abogado en nuestro caso, el dinero, donde mejor está, es en nuestro bolsillo.
No estoy diciendo que si el abogado pierde el caso no deba cobrar, sino que para cobrar debe molestarse, que es distinto.
Saludos